Adiós, Ray Bradbury
Ray Bradbury, el visionario que
rehuía de lo tecnológico
BBC Mundo
Jueves, 7
de junio de 2012
El escritor
y guionista estadounidense Ray Bradbury, fallecido esta semana a los 91 años de
edad, será recordado como un visionario por sus obras de ciencia ficción, y sin
embargo en su vida cotidiana prefería mantenerse alejado de los avances
tecnológicos.
Ray
Bradbury escribió cientos de novelas, relatos, obras de teatro y guiones de
televisión y cine en una prolífica carrera que comenzó a germinar allá por la década
de los 40 del siglo pasado.
Sus novelas
más famosas son Farenheit 451 y Something Wicked This Way Comes (La Feria de
las Tiniemblas), y de las compilaciones de relatos destacan sus Crónicas
Marcianas.
El nieto
del escritor, Danny Karapetian, dijo: "Influyó a muchos artistas,
escritores, profesores, científicos, y es siempre conmovedor y reconfortante
escuchar sus historias.
"Su
legado vive en su impresionante obra, formada por libros, películas, televisión
y teatro pero, lo que es más importante, vive en las mentes y corazones de
cualquiera que lo leyera, porque leer su obra era conocerlo".
Muchos de
sus seguidores le han rendido homenaje. El director de Moon, Duncan Jones,
lamentó la pérdida: "Otro espectacular visionario de la ciencia ficción
nos ha dejado".
Escritor visionario
Bradbury
nació en Illinois, Estados Unidos, y en la adolescencia se trasladó con su
familia a Los Ángeles.
Terminados
los estudios, se ganó la vida vendiendo periódicos y escribiendo en su tiempo
libre.
Desde
principios de los años 40, sus relatos comenzaron a aparecer en revistas como Weird
Tales, Astounding Science Fiction y Captain Future.
En 1947, se
casó con Marguerite 'Maggie' McClure y publicó su primer libro, Dark Carnival.
Tres años
más tarde, Bradbury empezó a construir su prestigio como escritor gracias a Crónicas
Marcianas, una colección de relatos sobre terrícolas materialistas que
colonizaban y explotaban de mala manera el planeta Marte.
Su novela
más celebrada, Farenheit 451, publicada en 1953, presenta una sociedad del
futuro en la que los libros están prohibidos.
La
historia, que recibe su nombre de la temperatura a la que supuestamente arde el
papel, fue profética – los personajes son adictos a telenovelas, mientras que
minúsculos auriculares, conocidos como "dedales del oído" suministran
una corriente constante de música y noticias.
Una versión
cinematográfica del libro dirigida por François Truffaut se estrenó en 1966.
Paradójicamente,
el autor especializado en ciencia ficción, que él prefería denominar
"fantasía", no era muy amigo de la tecnología.
Durante
años, Bradbury intentó evitar la publicación de Farenheit 451 como libro
electrónico. Le dijo al New York Times que los libros electrónicos "huelen
a gasolina quemada" y calificó internet como "una gran
distracción".
"Carece
de significado, no es real. Está en algún lugar en el aire", manifestó.
Pero cambió
de idea en 2011, cuando renovó su contrato editorial. Su agente señaló:
"Le explicamos la situación, que un contrato nuevo no sería posible sin
derechos de libro electrónico. Lo entendió y nos dio permiso para seguir adelante".
Bradbury
hizo varios trabajos para cine y televisión. Escribió el guión de la película
de John Houston, Moby Dick, y los guiones de muchas series de televisión,
incluyendo Suspense, El Show de Alfred Hitchcock y The Twilight Zone.
Lectura y
democracia
Bradbury
era un apasionado de la literatura. En 2008, declaró: "Si sabes leer,
tienes una educación completa para la vida y sabes cómo votar en una
democracia.
"Pero
si no sabes leer, no sabes cómo decidir. Eso es lo grande de nuestro país,
somos una democracia de lectores, y deberíamos mantenerlo así".
La
escritora Joanne Harris, autora de éxitos como Chocolat y Five Quarters Of the
Orange, le dijo a la BBC que lo que más preocupaba a Bradbury era "la idea
de la disminución del espíritu humano y la pérdida de la imaginación, que la
gente se volviera demasiado institucional. Esa era su parte pesimista.
Pero por el
resto, agregó Harris, Bradbury estaba lleno de optimismo. "Estaba
fascinado por el espacio, los cohetes, la exploración, las posibilidades".
Harris
recomienda a los lectores jóvenes que quieran conocer la obra de Bradbury que
comiencen con sus relatos cortos. "Sus compilaciones de historias cortas
son una maravilla y resultan muy atractivas para los jóvenes".